La movilidad eléctrica ha llegado para quedarse y cada vez más personas optan por vehículos de este tipo gracias a su eficiencia, bajo coste de mantenimiento y reducción de emisiones contaminantes. Ante esta realidad, las empresas relacionadas con el sector turístico deben adaptarse para ofrecer un servicio de calidad a estos clientes y fomentar la sostenibilidad. Una de las mejores formas de hacerlo es, precisamente, instalar puntos de recarga eléctricos en hoteles.
Los retos y oportunidades de la movilidad eléctrica en hoteles
Es innegable que la movilidad eco-friendly ha experimentado, a lo largo de los últimos años, un auge exponencial. Cada día son más las personas e instituciones que tienen como prioridad el cuidado del medioambiente y del entorno, evitando contaminar tanto directa, como indirectamente. En este sentido, los coches eléctricos son una realidad en aumento, siendo una de las mejores opciones de transporte sostenible que existen, tanto para particulares como para empresas e instituciones.
En este sentido, desde la entrada en vigor del Real Decreto-ley 29/2021 es obligatoria la instalación de, por lo menos, un punto de recarga para vehículos eléctricos por 40 plazas en diversos espacios privados y públicos, como restaurantes, oficinas, hospitales, supermercados, fábrica y hoteles, entre muchos otros.
El crecimiento de los vehículos eléctricos y su impacto en la industria hotelera
Como ya mencionamos, la utilización de coches eléctricos es cada día mayor. Una buena muestra de ello es que su venta en Europa no deja de aumentar año a año. De acuerdo con uno de los últimos informes de la OCU, en países como Noruega, Islandia, Suecia, Holanda o Dinamarca crecieron las ventas en 2022 entre un 80 y un 20%, respectivamente. En cuanto a España, aunque este porcentaje experimentó una subida mucho menos acusada, de un 3,8%, no se puede pasar por alto que sigue progresando.
Con estos datos sobre la mesa, es indudable que el crecimiento del uso de los coches eléctricos también ha tenido un gran impacto en la industria hotelera y de restauración. Por ejemplo, al ser este medio de transporte más común, cada año más turistas viajan en vehículos sostenibles y necesitan lugares donde puedan cargar sus baterías, de manera que los hoteles que ofrecen estaciones de carga eléctrica pueden experimentar un aumento en el número de clientes.
Los desafíos de la infraestructura de carga de vehículos eléctricos en hoteles
A la hora de instalar los puntos de recarga, los hoteles tienen que tener en cuenta algunos factores y variables, además de ciertos desafíos y retos. En primer lugar, hay que contemplar el espacio disponible. Como ya se puntualizó, el número mínimo de puntos de carga obligatorios los estacionamientos los marca el Real Decreto-ley 29/2021. Así, si un hotel tiene un estacionamiento con más de 20 plazas, debe tener al menos un punto de recarga por cada 40 plazas, o una fracción de 40 plazas hasta 1,000. Además, si el aparcamiento tiene más de 100 plazas, necesitará una estación de recarga adicional por cada 100 plazas extra. Otro aspecto a evaluar es la potencia eléctrica contratada. Para saber si esta es la adecuada, lo mejor es estudiar y analizar al detalle si la potencia demandada se ajusta a la contratada. Lo más indicado, en este caso, es contratar una auditoría energética para empresas.
Oportunidades de diferenciación y mejora de la experiencia del huésped
El contar con plazas de recarga de vehículos eléctricos es, cada vez más, definitorio a la hora de atraer clientes. Hay que pensar que, por ejemplo, en el caso de los coches que funcionan gracias al uso de carburantes, la disponibilidad de gasolineras no supone ningún problema para los usuarios, ya que su abundancia es tal que no se pone en duda el que alguna se encuentre cerca del hotel, restaurante o comercio que se desee visitar. Sin embargo, esto no ocurre con las electrolineras. Por esto mismo, todos los negocios que colocan puntos de recarga en sus instalaciones ven cómo aumentan sus potenciales clientes. Sin duda, esto es bastante definitorio a la hora de elegir en qué comercios comprar, y lo mismo ocurre con los hoteles, pensiones u hostales. Si ofrecen plazas para recargar los vehículos de los clientes de manera gratuita, esto influirá positivamente en la elección de un determinado alojamiento, así como en la planificación de una ruta de viaje. A fin de cuentas, los usuarios prefieren tener garantía de que podrán recargar sus vehículos sin preocupaciones.
¿Por qué deberías considerar instalar puntos de recarga de vehículos eléctricos en tu hotel?
La instalación de puntos de recarga de coches eléctricos en los hoteles tiene un impacto positivo a diferentes niveles.
Atracción de nuevos clientes y fidelización de los existentes.
La disponibilidad de varios puntos de recarga de calidad puede llegar a ser muy atractiva para muchos potenciales clientes, que se verían atraídos por ello, más si tenemos en cuanta que las plazas de recarga todavía no son muy abundantes.
Posicionamiento como hotel sostenible y comprometido con el medio ambiente
Al mostrar su compromiso con el cuidado del medio ambiente y el desarrollo de tecnologías más sostenibles, el hotel puede generar una imagen positiva y diferenciada en términos de responsabilidad social. De este modo, su reputación será mayor, atrayendo a más potenciales clientes que decidan alojarse.
Adaptación a las demandas del mercado y anticipación a futuras regulaciones
La sostenibilidad es un tema crucial en la actualidad debido a su vital importancia. Los gobiernos de casi todos los países están implementando medidas para luchar contra el cambio climático, reducir la contaminación y limitar la emisión de gases tóxicos al medioambiente. Es fundamental para las empresas, de esta manera, adoptar e implementar políticas verdes desde ahora para prever futuras normativas y así avanzar hacia un mundo más sostenible y respetuoso.
¿Cómo integrar vehículos eléctricos en la flota de transporte de tu hotel?
En el camino hacia la sostenibilidad es importante no solo instalar puntos de recarga para vehículos eléctricos, sino también integrar este medio de transporte en la propia flota del hotel. Sin embargo, esto también puede suponer algunos retos y desafíos para el negocio. Antes de nada, entonces, cabe tener en cuenta algunos factores determinantes.
Evaluación de la flota actual y determinación de necesidades
En primer término, se debe hacer un estudio y un análisis exhaustivo de la flota de vehículos actuales para responder a varias preguntas para aclarar los posibles cambios, modificaciones y optimizaciones necesarias: ¿se cuenta con vehículos tradicionales que funcionan por combustible, o bien ya usan una alimentación más sostenible y respetuosa? ¿Cuál es su eficiencia? ¿Cubren adecuadamente las necesidades de la empresa? Solo tras esta evaluación se podrá conocer qué transformación necesita la flota y cuántos vehículos eléctricos se precisan y para qué: para el transporte de los propios empleados o para trasladar a los clientes a diferentes puntos, como a los aeropuertos o a diferentes excursiones y actividades organizadas por el centro, por ejemplo. Además, para esto es esencial determinar el volumen medio de huéspedes que suelen emplear estos servicios y cómo puede aumentar la demanda en los meses de más actividad, como puede ser durante el verano.
Selección de vehículos eléctricos adecuados para las operaciones hoteleras
Ahora bien, ¿y qué vehículos eléctricos son los más adecuados? No todos los modelos son iguales, pues cada uno cuenta con una autonomía específica, además de un tamaño, capacidad de carga, versatilidad y comodidad distinta, entre muchas otras cosas. Para tomar una decisión informada y ajustada a su actividad, es forzoso realizar un estudio previo que contemple todas las opciones disponibles en el mercado. Este análisis implicará considerar aspectos como: la ubicación geográfica del hotel, las distancias que deberá recorrer el vehículo, el número de pasajeros o carga que se espera transportar, la frecuencia de uso, así como el presupuesto disponible.
Planificación de la infraestructura de carga y logística de recarga
Una vez que se han definido aspectos como el número de vehículos que se necesitan, sus tipos y modelos y su frecuencia de utilización, le toca el turno a la infraestructura de carga. Como ya comentamos, actualmente es obligatorio disponer de ciertos puntos de carga para asegurar unos servicios mínimos. Teniendo en esto en cuenta, cabe preguntarse si estos requerimientos son suficientes, o si es ineludible instalar más cargadores para cubrir las exigencias tanto de los clientes como de la flota empresarial, así como ajustar o no la potencia eléctrica contratada. Solamente de esta manera se podrá certificar que la infraestructura es la indicada y que satisface las necesidades del negocio.
Las subvenciones y ayudas disponibles para hoteles que apuestan por la movilidad eléctrica
Al igual que en el resto de sectores empresariales, es preciso caminar hacia un turismo más sostenible, que a su vez garantice que se evoluciona hacia un modelo de viaje respetuoso con el medioambiente y el entorno, no impactando negativamente. Por esto mismo, ya existen varios incentivos, ayudas públicas y programas gubernamentales para hacer dicho objetivo más sencillo a todos los hoteles y negocios de restauración.
Incentivos fiscales y financieros para la adquisición de vehículos eléctricos
Además de ayudas y programas públicos para financiar la instalación de puntos de recarga en hoteles, también existen múltiples beneficios fiscales y financieros para todas las empresas que se lancen hacia un modelo de transporte más ecológico. Aunque es cierto que estas suelen cambiar de una comunidad autónoma a otra, y, por lo tanto, hay que consultar siempre a las entidades correspondientes en cada caso, se pueden destacar:
- Deducción del IRPF: cada vez más CCAA ofrecen una deducción del IRPF a todos los negocios que apuesten por vehículos híbridos y eléctricos.
- Bonificación en el Impuesto de Matriculación: al adquirir un coche nuevo se tiene que abonar este conocido gravamen que cambia en función de las emisiones nocivas que emita el vehículo. Si es 0 contaminante, no será preciso pagar el impuesto.
- Beneficios en las zonas azules: muchos ayuntamientos permiten ya a los propietarios de coches eléctricos aparcar gratuitamente en zonas azules.
Colaboración con empresas y organizaciones dedicadas a la promoción de la movilidad eléctrica
Por último, no hay que pasar por alto la posibilidad de colaborar con organizaciones que incentiven y promuevan la movilidad eléctrica en los negocios. Lo más común es que esto se lleve a cabo mediante el trabajo conjunto público-privado, poniendo a disposición de todas las compañías que así lo deseen servicios, productos y bienes para mejorar y estimular un transporte responsable y sostenible. Esto, además, pueden conllevar consigo más ventajas empresariales y corporativas, como la ampliación de la red de contactos o la optimización de la imagen de la marca, entre otras cosas.
Un gran ejemplo es la AEDIVE o Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica. Esta organización agrupa a diferentes entidades y empresas del mundo del vehículo eléctrico, tales como productores, fabricantes o distribuidores, entre otros. Su función principal es la de promover e incentivar la innovación y la adopción de soluciones de movilidad sostenibles en España. En este sentido, colabora con administraciones públicas y distintas compañías para desarrollar programas y proyectos que fomenten la integración de las flotas eléctricas en los negocios.
Otro caso lo encontramos en la European Federation of Agencies and Regions for Energy and Environment o Fedarene, que ha desarrollado el programa e-Mobilty works. Como ellos mismos explican en su página web, su objetivo es el de integrar la movilidad limpia en los negocios europeos, implicando, en especial, a las empresas locales