¿Cuánto gasta un brasero eléctrico?
¡Llega el invierno y la temida bajada de las temperaturas! Momento en el que muchos buscan la mejor alternativa para calentar su hogar sin que se dispare la factura de la luz. Entre las opciones que existen en el mercado, encontramos el brasero eléctrico, uno de los sistemas de calefacción más tradicionales que han evolucionado mucho con el tiempo.
Es una solución ideal para calentar de manera muy rápida una estancia, ya que son aparatos compactos, pequeños y muy sencillos que ofrecen calor de manera casi instantánea, pudiendo regular su potencia en función de la temperatura que haya. Pero, ¿cuál es su gasto energético?
El consumo energético de un brasero eléctrico puede variar en función de su potencia, expresada en vatios (W), y el tiempo de uso. Para calcularlo de una manera aproximada puedes utilizar la siguiente fórmula:
Potencia del brasero eléctrico (W) x Horas de funcionamiento = Consumo de energía (kWh)
Si, además, quieres saber cuánto tendrás que pagar por ese gasto de energía, solo debes coger tu última factura de la luz, comprobar cuánto pagas por el kilovatio-hora y multiplicar ese precio por el consumo de energía de tu brasero eléctrico. El resultado de la operación será lo que pagues a final de mes por utilizar el brasero eléctrico en tu hogar. ¿Eres de los que ya cuentan con la mejor tarifa de luz del mercado?
¿Qué potencia necesita un brasero eléctrico?
La potencia de un brasero eléctrico, en términos generales, suele rondar los 800 W y 1.000 W. Aunque, debes tener en cuenta que la necesidad de vatios por parte de este sistema de calefacción va a depender de varios factores claves como son: el tamaño de la espacio interior que quieres calentar, la temperatura ambiente, el grado de aislamiento y tus propias preferencias de bienestar y confort térmico.
Por eso, desde TotalEnergies queremos ayudarte con una serie de pautas para que sepas cuál es la potencia adecuada en cada caso:
- Para uso ocasional: si solo vas a utilizar el brasero eléctrico de manera puntual o en momentos concretos del día, lo mejor es que elijas un modelo de menor potencia (500 W).
- Para calentar espacios pequeños: si tu intención es calentar una habitación pequeña, con un brasero eléctrico de 1000 W tendrás suficiente.
- Para calentar espacios de tamaño mediano: si quieres calentar un dormitorio o un salón de tu casa, entonces un brasero eléctrico de 1000 a 1500 W sería la mejor opción.
- Para calentar grandes espacios: si la habitación que quieres calentar es grande o el clima es más frío de lo normal, puedes adquirir un brasero eléctrico de hasta 2000 W de potencia.
Factores a tener en cuenta a la hora de adquirir un brasero eléctrico
Si te has decidido a comprar un brasero eléctrico para calentar alguna de las estancias de tu hogar, debes valorar una serie de recomendaciones si quieres que tu elección sea la correcta:
- Potencia: como es la que mide la intensidad del calor que emite el brasero eléctrico, lo ideal es que sea regulable para poder ajustarla a la temperatura que deseamos en nuestro hogar, sin excederte en el consumo de energía.
- Resistencia: los braseros eléctricos suelen llevar una, aunque hay modelos que cuentan con dos, lo que significa que la potencia es mayor. La mejor opción es elegir un brasero que lleve la resistencia blindada para que sean más duraderas.
- Seguridad: cuando se combina calor y electricidad es fundamental prestar mucha atención a la seguridad del aparato. Por ello, nuestra recomendación es que elijas:
- Un brasero que cuente con un sistema contra el sobrecalentamiento, el cual consiste en una apagado automático al detectar un exceso de calor.
- Un brasero que tenga regulador de potencia y rejillas protectoras, gracias a las cuales evitarás posibles quemaduras, y más si hay niños en casa.
- Un brasero que tenga un sistema de desconexión automática al detectar tejidos como puede ser la falda de una mesa camilla, donde es muy común colocar los braseros.
¿Cómo ahorrar en el consumo de un brasero eléctrico?
Ahorrar en el consumo energético de un brasero eléctrico es posible si sigues estas recomendaciones:
- Eficiencia energética: elige un brasero eléctrico que tenga una alta eficiencia energética. Además, ten en cuenta que los modelos más modernos a menudo están diseñados para contribuir al ahorro energético.
- Aislamiento adecuado: debes asegurarte de que la estancia que quieres calentar está bien aislada para poder retener el calor. Evita que se produzcan pérdidas, utilizando cortinas gruesas y cerrando bien las puertas y ventanas.
- Ubicación estratégica: si quieres maximizar la eficacia de un brasero eléctrico, evita colocarlo cerca de puertas o ventanas abiertas, así evitarás que tenga que trabajar más para compensar esas pérdidas de calor.
- Aprovecha otras fuentes de calor: complementa el uso del radiador eléctrico con mantas o ropa abrigada para, así, para no depender exclusivamente del brasero.
- Apaga el brasero si no lo necesitas: sobre todo si sales de la habitación donde está el brasero o te vas de casa, ya que no tiene sentido tenerlo encendido si no hay nadie que pueda aprovechar el calor. ¡Evita cualquier derroche innecesario!
- Utiliza temporizadores: te ayudarán a controlar las horas de encendido del radiador eléctrico y a evitar un uso innecesario.
- Mantenimiento periódico: debes asegurarte de que todos los componentes del brasero eléctrico estén limpios y funcionen a la perfección, así conseguirás que sea más eficiente y consume menos energía. ¿Conoces nuestro servicio de mantenimiento FACILITA?